Eva
Tramell y Gideon Cross tendrán que luchar con todas sus fuerzas para que su
historia de amor triunfe.
La
desmedida atracción física que existe entre ambos juega a su favor, pero las
tentaciones carnales no están hechas para los que les gusta bailar con el
diablo, y el tormentoso pasado de ambos tampoco les ayudará a conseguir tener
la típica relación romántica.
Eva
y Gideon lucharán por tener su final feliz, pero ni esto es un cuento de hadas
ni ellos son personajes de fábula, ¿Será suficiente su amor para seguir juntos,
o su futuro pasa por camas separadas?
Esta segunda parte comienza tal y donde acabo “No te escondo nada”, Gideon está de verdad enamorado, y está dispuesto a hacer cualquier cosa por mantener a Eva a su lado, por su parte, Eva está cada vez más asombrada de él y de cómo consiguió tenerlo para ella.
La relación entre ellos ha tenido un notorio cambio,
donde a través de dedicación y colaboración en pareja logran un bien común…
Pero este placer les dura muy poco, pues los dramas no tardan en ocurrir
alrededor de esta pareja.
Es un libro que sin duda se fía de la pasión entre
los personajes, un segundo libro más intenso, donde el final impactara a
cualquier lector que le guste esta historia, sigue habiendo celos y
discusiones, pero ambos tendrán que hacer esto a un lado para que su relación
logre funcionar y tomar el ritmo adecuado en una historia de amor usual. Y
aunque lo del tormentoso pasado de Gideon aún no se resuelve, ocurren otros
aspectos que sin duda saciaran tu intriga.
Si la primera parte te gusto, no debes dudar que
esta segunda te encantara, es una lectura entretenida con dramas intensos,
escenas pasionales, situaciones reflexivas, además de convertirse en un libro
rápido, que se lee en poco tiempo. Aunque alguna gente dice que tiene algo de
parecido con Fifty Shades pero en este libro se destrona totalmente de ello.
Por ahora ya estoy harta de la espera y quiero leer
el siguiente libro, pero parece que la autora no lleva prisa, porque no ha
mencionado nada sobre la continuación y espero no tarde mucho, porque odio
esperar.
0 comentarios